1. Cuida tus hábitos
Los buenos hábitos resultan fundamentales para alcanzar los objetivos en cualquier tipo de disciplina y se tienen que desarrollar desde las etapas escolares hasta la vida profesional. Sé puntual y ordenado, respeta los horario y tiempos de los demás.
2. Organiza los pendientes
Es mejor que organices tu agenda y cada tarea pendiente, anótalos en una libreta o en alguna aplicación digital que exista para tal objetivo. Así lograrás que tus tareas no te tomen por sorpresa al final.
3. Haz equipo
Nunca te olvides que el trabajo en equipo es fundamental, no dejes de cultivar esta modalidad que se usa mucho en tu terreno profesional y que hará la diferencia entre lograr o no que los objetivos de logren a tiempo .
4. No desistas
Nada sería peor que perder aún más tiempo si abandonas tus esfuerzos a la mitad de su curso. A unas cosas tendrás que dedicar más atención que a otras.
5. No desperdicies tiempo
Es mejor dedicar diez minutos con concentración plena a una actividad que perder una hora divagando frente al teclado sin que surjan ideas interesantes.
6. No postergues
No encuentres pretextos para no hacer todo eso que de cualquiera manera tendrás que realizar.
7. No desperdices tu energía
Evita que te interrumpan durante tus horas de mayor actividad, que haya distractores o que adquieras otra clase de compromisos que te impidan cumplir con lo que tienes asignado.
8. Identifica lo que te quita tiempo
Hay factores muy específicos que evitan que tu tiempo sea aprovechado de la manera adecuada: falta de organización, no saber identificar las prioridades, mal aprovechamiento de las propias habilidades,no saber delegar tareas o hacer equipo, postergar los pendientes, decisiones precipitadas, desorden, falta de planificación y disciplina, etcétera.